FeijooMarcial

La Sexta emitirá una entrevista con el narcotraficante Marcial Dorado en la que expondrá su relación con el actual Presidente de Xunta, Nuñez Feijóo en una entrevista el próximo domingo 15 de marzo.

Falta menos de un mes para las elecciones del 5 de abril y dos nubarrones acechan sobre las gaviotas del Partido Popular: por un lado, el programa Lo de Évole anuncia la emisión de la entrevista con Marcial Dorado, que cumple condena en la cárcel de Villabona (Asturias) por narcotráfico y blanqueo. Por otro lado, el coronavirus amenaza con contagiar a las personas mayores donde el PP tiene uno de sus mayores caladeros.

El escándalo saltó a la prensa en 2013 cuando se publicaron las famosas fotos de la amistad entre el presidente de la Xunta y Marcial Dorado. Por aquellos tiempos, en los años 90, ambos navegaban por la ría de Vigo, iban de excursión a los Picos de Europa y se fotografiaban juntos. Hasta tal punto eran amigos que ambas parejas realizaron viajes juntos a Canarias, Ibiza o Portugal. El PP recuerda que Feijóo ya ha dado todas las explicaciones. Lo siento, pero quizá a los ciudadanos no nos ha quedado claro y por eso volvemos a insistir. ¿Cómo puede un político ser íntimo amigo de un narcotraficante y esperar que nadie haga preguntas? Évole le preguntó a Feijóo sobre las 66 veces en que su amigo había aparecido en prensa vinculado al contrabando y al narcotráfico.

De la misma manera que deseamos conocer la amistad de Pablo Iglesias con los líderes venezolanos para formar nuestro voto sabiendo a qué nos atenemos. De igual forma que queremos saber que significan las siglas M.R en los papeles de Bárcenas o queremos conocer en que se ha gastado el dinero de los cursos de formación de la Junta de Andalucía, deseamos saber hasta qué punto el presidente de Xunta tiene las manos sucias. Igual que ocurrió con el señor X y los GAL, la fortuna del Rey Juan Carlos o las comisiones de Eduardo Zaplana en las ITVs, la fortaleza de una democracia se manifiesta en la claridad con las que los asuntos turbios quedan aclarados.

No conocer toda la información hace que los ciudadanos más desconfiados con el funcionamiento de las instituciones duden del sistema y ¿acaso nos debe sorprender que eso ocurra?